Beijing 2008... ¿se usará como otra distracción?

Ya me veo a la pareja real metiendo presión por todas las disciplinas deportivas para que ganen algo, para que estén hasta último minuto en la ambigua amiga y enemiga República Popular China.

¿Porqué es amiga y enemiga la tierra de Mao? Eso debería ser así según la ezquizofrenia de nuestra Realeza. Es amiga porque es una república popular, sin banderitas del "Che", sin Simón Bolivar y sin la pareja K, pero es bien popular y comunista, así que no le rompan las bolas a nuestro modelo a seguir. Pero si analizamos los discursos de los últimos meses de Barbie Presidenta y El Payaso Parpajo (que tiene un ojo bien y otro para el carajo), la "marea amarilla" debería ser nuestra mayor enemiga ya que son los principales compradores de soja (nombre cristífico: yuyus oligarquis non redistributibus).

Más allá de esta dicotomía en la que no sabemos que lado adoptar, se nos vienen encima aquellos juegos que los griegos dieran por llamar olimpiadas.

Para el gobierno esto es muy bueno ya que el promedio de la mersa argentina (que a ojo de buen cubero debe andar por el 80% de la población, si es que no me quedo corto) va a estar más pendiente de los dobles del Manu, de los partidos de Las Leonas, de los zapallos con raquetas, de los voleibolistas y de los futboludos que de todas las chanchadas que se hacen en nuestra bendita tierra.

Las olimpiadas vienen como anillo al dedo para tapar cachivaches del estilo reestatización de Aerolíneas Argentinas, políticas agrarias no definidas, tarifazos varios, el no cambio de viejos ministros artistas (ya que se la pasan dibujando), la incorporación de ministros obras de arte con problemas de registro de marca (están dibujados y son varias las posibles autorías ideológicas), el no avance del ya acordado y endeudado tren bala y la no aparición con vida de Julio López y los fondos de Santa Cruz (seguramente el que encuentre a uno de ellos va a encontrar al otro al lado).

Sigamos inaugurando obras ya inauguradas y actuando como si el País fuese el ombligo propio que vamos a lograr ser un país en serio... un país en serio quilombo.